Sobrin@s, ¡esto se puso candente! ¿qué opinan de las famosas mordiditas? Dicen que esta es una forma de demostrar deseo a la hora del delicioso o de los previos. Yo creo que es casi como un mensaje de: «Te quiero comer completit@», pero me pongo a pensar: ¿qué pasa si duelen? ¿van o no van?
Yo creo que estas cosas no son para tod@s, así que aquí les comparto tres respuestas típicas a la pregunta: ¿van o no van las mordidas en el delicioso?
- “¡Claro que yes!”: Si tu respuesta fue positiva, entonces eres del team que le dice ¡sí a la mordidita! Ya sea porque te gusta que te muerdan, morder, ¡o ambas cosas! Aquí solo te diré que no es algo raro. De hecho un dolor leve es una sensación agradable para varias personas (¡si les contara!). Algo no tan bueno son las marcas, ¡ni que estuviéramos marcando territorio! Contrólense, sobrin@s.
- “No lo sé, tío Piel”: En ese caso, ¡tranquilidad! Tómate tu tiempo y si quieres darle un intento, prueba con mordidas muy suaves en zonas no visibles, ni muy sensibles. ¡Suave ahí! La idea no es generar daño, sino explorar.
- “No es para mí”: Si no te pone, no te pone. Nadie te debe forzar a hacer algo que no quieras, ¡aquí somos pro-consentimiento! Si hay ganas, se hace. Si no, safari no más.
Si estás dispuest@ a tolerar un poco de dolor en una noche loca de placer, tal vez estas mordidas son lo tuyo. Eso sí, tres consejos comprobados del tío Piel: No te excedas en la fuerza, no uses dientes en la zona genital y sé cariños@.
