Mis sobrinas tienen un ritmo diferente y puede que se tarden un poco en llegar, pero es nuestra misión ayudarlas a que lleguen. A veces nosotros terminamos y pensamos que ya todo acabó, ¡pero despierten, sobrinos! Tenemos que asegurarnos de que ellas también la pasen bien, así que sigue lo siguientes consejos:
- ¡Usa su vibrador favorito! Prueba con distintas velocidades y colócaselo en zonas en las que no hay pierde: Sus senos, nalgas, muslos y por supuesto: poco a poco, acercarlo a los labios vaginales y al clítoris.
- ¡Hazle el mejor sexo oral de su vida! Las lamidas, besos y lenguetazos nunca fallan.
- Ayúdala a masturbarse usando tus dedos en sus labios vaginales, en su clítoris e incluso, ingresando un par de dedos en su cavidad vaginal, mientras acaricias otras zonas erógenas. Eso sí: ¡Suave! No es necesario ser tosco.
Y lo más importante: ¡No supongas, pregúntale! Muchas veces el mete-saca no les basta para llegar y no es que sean golosas, es simplemente que su cuerpo funciona distinto. Sobrinos: Yo sé que ustedes están siempre al servicio del placer, así que – con o sin soldado disponible – ustedes pueden lograrlo. Confío en ustedes.
